TODOS
SOMOS DIFERENTES
¿Qué hace que el mundo en el que
vivimos sea tan maravilloso? Muy sencillo: las personas que en él vivimos. ¿Y
por qué? Porque lo que lo hace especial es que todos somos diferentes y cada
uno de nosotros aportamos algo de nuestra propia esencia.
No soy capaz de imaginar un
mundo, un lugar, una familia, un grupo de personas o una clase en la que todos
sus componentes sean iguales…¡qué aburrimiento! No aprenderíamos nada, no compartiríamos
inquietudes ni dudas, no encontraríamos motivación alguna o deseos que nos
empujaran a actuar de manera diversa.
No sólo aprendemos en la escuela
y en los libros, cierto es que una de las mayores enseñanzas que encontramos es
la de la vida que nos narran todos aquellos que nos rodean: quizás un libro de
historia nos resulte aburrido, pero… ¿qué me dices de esas batallitas que te
cuenta tu abuelo?
Podemos pensar que ser diferente
es algo negativo, pero todo lo contrario…ser diferentes nos hace ser un
elemento enriquecedor de las personas a las que rodeamos y que nos rodean.
Puede ser que no seamos buenos jugando al fútbol, pero seguro que otra
habilidad tenemos que podemos mostrar a los demás…como les digo a ‘mis niños’
cuando hablamos de ser diferentes: ¡Imaginaros si todos fuéramos igual de
buenos jugando al fútbol que Cristiano Ronaldo! El fútbol en este caso no
tendría emoción, y así sucedería con todo. La emoción de vivir nos la dan
nuestras diferencias.
Para trabajar en el aula de 1º de
primaria las diferencias entre unos y otros haremos el visionado del cuento “Por
cuatro esquinitas de nada” y tras verlo realizaremos un pequeño debate hasta
llegar a la conclusión de que todos somos diferentes pero que debemos
respetarnos.
